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Todas las personas tienen una curvatura natural de la columna vertebral, pero, existen casos en la que esa curvatura es anormal, en forma de C o S y se le denomina escoliosis (del griego, torcido). Aproximadamente tres de cada cien personas la tienen, con más frecuencia aparece en niñas y en algunos casos, empeora en periodos rápidos de crecimiento.
Para diagnosticarla, además de utilizar RX, la gammagrafía ósea es una prueba diagnóstica muy indicada, ya que el nivel de radiación en comparación a la región a estudiar es menor que en otros estudios, proporcionando además mucha información sobre las repercusiones en el resto de la estructura ósea (caderas, pelvis, articulaciones sacroilíacas, etc.…)
No todas las personas presentan los mismos síntomas; estos son algunos de ellos:
- Dolor de espalda ( lumbar o dorsal)
- Sensación de cansancio en la columna después de estar en pie o sentado mucho tiempo.
- Hombros y caderas a distintas alturas. Un omóplato más prominente que otro.
- Curvaturas de la columna más hacia un lado
- Cabeza no centrada sobre la pelvis
- Apariencia de cadera elevada.
- Cajas torácicas a distintas alturas
- etc.…
Aconsejamos realizar la gammagrafía ósea en aquellas personas con sospecha o evidencia de escoliosis, para evaluar el estado del esqueleto y sus posibles alteraciones compensatorias.
