http://bit.ly/2AbWJHT
Dormir bien es tan esencial y positivo para el organismo como llevar una buena alimentación o practicar actividad física regularmente. Un sueño reparador permite cumplir de mejor forma con las exigencias diarias, pero también ayuda a controlar el estrés y a mantener un estado de ánimo equilibrado. El sueño es una función del organismo que debemos satisfacer. Para su regulación participan diversos centros y sustancias interrelacionadas entre si, destacando la glándula pineal y la melatonina.
La melatonina es la hormona natural del sueño y regula el reloj biológico de nuestro cuerpo, es decir, varía de acuerdo al ciclo diurno/nocturno. La melatonina es sintetizada a partir del aminoácido esencial triptófano. Se produce, principalmente, en la glándula pineal, y participa en una gran variedad de procesos celulares, neuroendocrinos y neurofisiológicos, controlando el ciclo diario del sueño.
Claves para un buen sueño, según el Dr. Estivill
- Disminuir el ritmo de actividad a medida que se acerca la hora de dormir.
- Evitar tomar café, te, cacao, alcohol o estimulantes nerviosos durante las últimas horas de la tarde.
- Desconectar antes de dormir utilizando técnicas de relajación, lectura tranquila o música relajante.
- Fijar una hora regular para acostarse o levantarse.
- Crear un espacio agradable para dormir.
- Controlar la temperatura de la habitación entre 20 y 23 grados centígrados. Evitar aire acondicionado.
- Usar tapones o antifaz si la habitación no reúne condiciones suficientes de luz y ruido.
- Si no consigues conciliar el sueño en 30 minutos, levántate a otra habitación con poca luz y realiza alguna actividad relajante ( música, lectura). Regresa al cabo de 5-10 minutos.
- Una vez en la cama, no mires el reloj.
- No te obsesiones con dormir rápido y seguido, aumentarás la excitación y dificultará el sueño.
- No bebas grandes cantidades de líquido y cena ligero, a ser posible, alimentos ricos en melatonina como el yogur, verduras , cereales, nueces… y deja pasar unas 2 horas para acostarte.
La pérdida de horas de sueño repercute directamente en un menor grado de alerta que a su vez, aumenta el riesgo de contraer depresión o de sufrir accidentes laborales, así como un descenso de nuestro rendimiento físico e intelectual.
Si tienes problemas para dormir, no dudes en acudir a un especialista que te ayude. Desaconsejamos el uso de sustancias o medicamentos para inducir el sueño si una correcta prescripción médica.